miércoles, 11 de junio de 2014

Una mirada hasta el fondo del detalle

De nuevo Google nos sorprende de manera gratificante con un proyecto a gran escala totalmente gratuito. Para los amantes del arte llegó la aplicación que siempre desearon.
Ya en Google Earth había una pequeña pista desde hace varios años: había una capa referente al Museo del Prado, en donde si hacías clic en el icono, te llevaba virtualmente dentro del museo para ver unas cuantas obras a una resolución nunca vista antes.
Parecía que ya había quedado en el olvido esa gran idea cuando de pronto Google sacó Art Project, sin duda una revolución para disfrutar y estudiar las grandes obras del arte.
No solo se pueden recorrer los museos virtualmente, con vistas 360º y con la técnica de Street View, sino que además, en muchas de sus obras se puede hacer zoom de un modo espectacular, visualizando detalles nunca vistos antes.

http://www.google.com/culturalinstitute/user-galleries?projectId=art-project

martes, 3 de junio de 2014

El STORYBOARD. Aplicación on-line para generar historietas.

https://www.storyboardthat.com/



Crea tu primer Storyboard on-line sobre el siguiente cuento infantil:

 - ¡Papá, papá!, ¿es ya la hora de ir al colegio? – Preguntó, María Luisa, a las cinco de la mañana, dando unos golpecitos sobre el hombro de su padre. Y sin que este abriera los ojos, le respondió con una voz muy cansada y lenta: -No, hija no,… aún no es la hora de ir al colegio. Acuéstate y duérmete de nuevo, que ya te avisaremos cuando sea la hora.
 - ¡Mamá, mamá!, ¿es ya la hora de ir al colegio? – Volvió a preguntar María Luisa, a las seis de la mañana, dando un besito en la mejilla de su madre. Y sin que esta abriera los ojos, le respondió con una voz muy cansada y lenta: -No, hija no,… aún no es la hora de ir al colegio. Acuéstate y duérmete de nuevo, que ya te avisaremos cuando sea la hora.
 La niña volvió a su cama, pero no podía dormir ya que en su cabeza sólo veía a sus compañeros que ya habían llegado -antes que ella- al colegio y estaban haciendo unas actividades muy divertidas; mientras, la maestra les explicaba cómo debían hacerlo bien. Luego se los imaginaba en el patio del colegio, formando corros para jugar a “corre que te pillo”, “al escondite”, o “a la llevas tú” y, nuevamente, el nerviosismo y el deseo de estar en el colegio, la volvían a levantar de la cama, a acercarse a la de sus padres y decirles: – ¡Papá, mamá!, ¿es ya la hora de ir al colegio?…
 De esta manera trascurrió toda la noche hasta que a las 8 de la mañana cuando María Luisa volvió a despertarlos, con cara de mucho sueño -por no haber podido descansar bien en toda la noche- se levantaron, se asearon, se vistieron, tomaron un sabroso desayuno y prepararon un pequeño bocadillo y una manzana para el recreo de su hijita María Luisa, la cual –impaciente- ya había guardado todas sus cosas en la cartera del colegio y esperaba junto a la puerta de casa.
 Como el colegio no estaba muy lejos, iban andando todos los días, pero aquel día -al llegar- notaron algo extraño, ya que aún no había llegado nadie. Su papá con cara de extrañeza miró su reloj para comprobar que era la hora de entrada y le dio unos golpecitos para ver que no se había parado. En ese momento vio a Pedro, el vendedor de periódicos que abría su kiosco y le preguntó: – ¿Pedro qué pasa hoy que no han abierto aún las puertas del colegio? A lo que respondió: “Porque hoy es domingo…”
 Esto os enseñará que por muchas, muchas ganas que tengáis de colegio, de aprender y de estar con vuestros amigos, también hay que disfrutar de los días de descanso.